El verano es una época del año que muchos esperan con ansias. Las vacaciones, el buen tiempo, las reuniones sociales y la relajación general que caracteriza esta temporada pueden ser una fuente de disfrute y descanso. Sin embargo, para aquellos que han luchado o están luchando contra las adicciones, el verano puede presentar desafíos particulares que aumentan el riesgo de recaídas.
Factores de Riesgo en Verano
1. Aumento de Reuniones Sociales
Las reuniones sociales como fiestas, barbacoas y eventos al aire libre son comunes en verano. Estas ocasiones, aunque agradables, a menudo incluyen el consumo de alcohol y, en algunos casos, otras sustancias. La presión social y la normalización del consumo pueden hacer que sea más difícil para las personas en recuperación mantenerse alejadas de sus adicciones.
2. Cambio en la Rutina
El verano suele traer cambios en la rutina diaria. Las vacaciones, los viajes y el tiempo libre adicional pueden desestructurar las rutinas que muchas personas en recuperación encuentran esenciales para su estabilidad. La falta de una estructura diaria puede llevar a momentos de aburrimiento o soledad, lo que puede ser un detonante para la recaída.
3. Recuerdos y Asociaciones
El verano puede traer recuerdos de épocas pasadas en las que el consumo de sustancias era parte de la diversión. Estos recuerdos y las asociaciones que los acompañan pueden desencadenar deseos de consumo, especialmente en lugares o situaciones que están estrechamente ligados a la adicción anterior.
4. Presión Social y Expectativas
Existe una fuerte expectativa social de disfrutar y relajarse durante el verano. Para las personas en recuperación, esta expectativa puede ser una fuente de presión adicional. La percepción de «perderse» la diversión puede generar sentimientos de aislamiento o frustración, que pueden llevar a la recaída.
El verano es una época del año que muchos esperan con ansias. Las vacaciones, el buen tiempo, las reuniones sociales y la relajación general que caracteriza esta temporada pueden ser una fuente de disfrute y descanso. Sin embargo, para aquellos que han luchado o están luchando contra las adicciones, el verano puede presentar desafíos particulares que aumentan el riesgo de recaídas.
Factores de Riesgo en Verano
1. Aumento de Reuniones Sociales
Las reuniones sociales como fiestas, barbacoas y eventos al aire libre son comunes en verano. Estas ocasiones, aunque agradables, a menudo incluyen el consumo de alcohol y, en algunos casos, otras sustancias. La presión social y la normalización del consumo pueden hacer que sea más difícil para las personas en recuperación mantenerse alejadas de sus adicciones.
2. Cambio en la Rutina
El verano suele traer cambios en la rutina diaria. Las vacaciones, los viajes y el tiempo libre adicional pueden desestructurar las rutinas que muchas personas en recuperación encuentran esenciales para su estabilidad. La falta de una estructura diaria puede llevar a momentos de aburrimiento o soledad, lo que puede ser un detonante para la recaída.
3. Recuerdos y Asociaciones
El verano puede traer recuerdos de épocas pasadas en las que el consumo de sustancias era parte de la diversión. Estos recuerdos y las asociaciones que los acompañan pueden desencadenar deseos de consumo, especialmente en lugares o situaciones que están estrechamente ligados a la adicción anterior.
4. Presión Social y Expectativas
Existe una fuerte expectativa social de disfrutar y relajarse durante el verano. Para las personas en recuperación, esta expectativa puede ser una fuente de presión adicional. La percepción de «perderse» la diversión puede generar sentimientos de aislamiento o frustración, que pueden llevar a la recaída.
Estrategias para Evitar Recaídas en Verano
1. Mantén una rutina
A pesar de los cambios en el horario habitual, es crucial mantener una rutina diaria. Establece horarios para las comidas, el ejercicio, el tiempo de descanso y las actividades de ocio. Mantener una estructura ayudará a reducir el riesgo de recaídas.
2. Planifica con Anticipación
Si sabes que asistirás a eventos sociales donde habrá consumo de sustancias, planifica con anticipación. Llega con una estrategia clara, como llevar tu propia bebida no alcohólica o tener una excusa preparada para evitar consumir. No dudes en retirarte temprano si te sientes incómodo o tentado.
3. Busca apoyo
Mantén el contacto con tu red de apoyo, ya sean amigos, familiares o grupos de apoyo. Hablar con alguien que entienda tu situación puede ofrecerte el soporte necesario para resistir la tentación. Considera asistir a reuniones adicionales de grupos de apoyo durante el verano.
4. Establece límites
Mantén el contacto con tu red de apoyo, ya sean amigos, familiares o grupos de apoyo. Hablar con alguien que entienda tu situación puede ofrecerte el soporte necesario para resistir la tentación. Considera asistir a reuniones adicionales de grupos de apoyo durante el verano.
5. Cuida tu salud mental
El estrés, la ansiedad y otros problemas de salud mental pueden ser desencadenantes de la recaída. Dedica tiempo a actividades que promuevan tu bienestar mental, como la meditación, el yoga, la lectura o cualquier otra actividad que te relaje y te haga sentir bien.
6. Recuerda tus logros
Mantén presente tu progreso y tus logros en la recuperación. Reflexionar sobre el esfuerzo y el tiempo que has invertido en tu bienestar puede fortalecer tu determinación para mantenerte sobrio.
Estrategias para Evitar Recaídas en Verano
3. Busca apoyo
Mantén el contacto con tu red de apoyo, ya sean amigos, familiares o grupos de apoyo. Hablar con alguien que entienda tu situación puede ofrecerte el soporte necesario para resistir la tentación. Considera asistir a reuniones adicionales de grupos de apoyo durante el verano.
4. Establece límites
Mantén el contacto con tu red de apoyo, ya sean amigos, familiares o grupos de apoyo. Hablar con alguien que entienda tu situación puede ofrecerte el soporte necesario para resistir la tentación.
1. Mantén una rutina
A pesar de los cambios en el horario habitual, es crucial mantener una rutina diaria. Establece horarios para las comidas, el ejercicio, el tiempo de descanso y las actividades de ocio. Mantener una estructura ayudará a reducir el riesgo de recaídas.
2. Planifica con Anticipación
Si sabes que asistirás a eventos sociales donde habrá consumo de sustancias, planifica con anticipación. Llega con una estrategia clara, como llevar tu propia bebida no alcohólica o tener una excusa preparada para evitar consumir.
5. Cuida tu salud mental
El estrés, la ansiedad y otros problemas de salud mental pueden ser desencadenantes de la recaída. Dedica tiempo a actividades que promuevan tu bienestar mental, como la meditación, el yoga, la lectura o cualquier otra actividad que te relaje y te haga sentir bien.
6. Recuerda tus logros
Mantén presente tu progreso y tus logros en la recuperación. Reflexionar sobre el esfuerzo y el tiempo que has invertido en tu bienestar puede fortalecer tu determinación para mantenerte sobrio.
El verano ofrece una serie de contextos y situaciones que ponen en peligro la recuperación del adicto y dificultan uno de los objetivos principales que es el mantenimiento de la abstinencia.
El verano puede ser una temporada desafiante para las personas en recuperación de adicciones, pero con planificación, apoyo y estrategias adecuadas, es posible disfrutar de estos meses sin poner en riesgo tu sobriedad. En el Instituto Ágora, entendemos los desafíos únicos que enfrentan las personas en recuperación y estamos aquí para ofrecer el apoyo y las herramientas necesarias para mantenerse en el camino hacia una vida libre de adicciones. Si sientes que necesitas ayuda adicional durante este tiempo, no dudes en contactarnos.
¡Tu bienestar es nuestra prioridad!.